Cinco detenidos y un investigado por robar medio centenar de ovejas en granjas de Cartagena, Torre Pacheco y San Javier

La Guardia Civil de la Región de Murcia ha logrado desarticular un grupo delictivo integrado por seis personas y asentado en Murcia, al que se le atribuye la presunta autoría de delito de robo con fuerza en explotaciones ganaderas. A los responsables de la organización -cinco detenidos y un investigado- se les ha incautado en una granja del municipio murciano parte del ganado sustraído antes de su comercialización ilícita, que ya ha sido devuelto a sus propietarios.

La denominada operación 'Garruchal' se inició a principios del pasado mes de marzo, cuando se detectó un incremento de robos en explotaciones ganaderas de las comarcas del Campo de Cartagena y Mar Menor, unos hechos que generaron cierta alarma social entre los profesionales del sector. Las primeras pesquisas practicadas permitieron a los investigadores constatar que el objetivo de esta actividad ilícita era la sustracción de ganado ovino con un similar 'modus operandi'.

En las inspecciones técnico oculares realizadas, los guardias civiles verificaron que se trataba de robos en granjas de los términos municipales de Cartagena, Torre Pacheco y San Javier, donde se empleaba la fuerza para acceder a su interior y sustraían las cabezas de ganado. El ganado sustraído era trasladado rápidamente hasta otras granjas de Torre Pacheco y de municipios colindantes, en los que pasaban desapercibidos con el ganado propio de estas y donde se les cambiaban los crotales identificativos por otros de la explotación ganadera receptadora, dificultando considerablemente su detección y vinculación a los robos investigados.

Cuando los investigadores detectaron esta estrategia ilícita desarrollaron un amplio y ágil dispositivo de inspección en granjas y corrales de ganado sospechosos, así como en patios y otros lugares donde se pudiera sacrificar este tipo de ganado, del que se obtuvieron valiosos indicios. Fruto de la investigación, los guardias civiles ubicaron un corral en la capital murciana, próximo al término municipal de Torre Pacheco, en el que se localizó más de medio centenar de cabezas de ganado ovino sustraídas.

En esta actuación los guardias civiles recuperaron y devolvieron a sus propietarios las cabezas de ganados halladas que habían sido sustraídas, cuyo valor está cerca de los 100.000 euros. Durante la inspección, los investigadores también intervinieron herramientas y útiles empleados para manipular de forma ilícita los crotales identificativos.

De la investigación se desprende que el grupo delictivo ahora desmantelado estaba perfectamente estructurado y coordinado. Sus integrantes tenían repartidas las tareas y actuaban de forma sincronizada. Los principales cometidos eran la sustracción del ganado, la manipulación de su identificación y su reintroducción en el circuito comercial a través de una explotación vinculada a uno de los miembros, con el fin de eludir controles sanitarios y legales.

De la misma forma, además de las actuaciones por los hechos delictivos detectados y esclarecidos, la Guardia Civil ha detectado multitud de infracciones en el ámbito sanitario y administrativo, que han sido denunciadas ante las autoridades competentes.

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