El PP exige la dimisión del ministro: «Se la ha ganado a pulso»

Bolaños declaró este miércoles en su despacho ante el juez Juan Carlos Peinado por su papel en la contratación dentro de su departamento de la asesora Cristina Álvarez, la cual ejerció como ayudante de Begoña Gómez en sus negocios privados; una circunstancia que se encuentra bajo investigación en la causa que concierne a la mujer del presidente. El titular de Justicia afirmó ante el instructor que no intervino en la decisión de contratar a la asesora y que, además, es «normal» que las mujeres de los presidentes del Gobierno tengan este tipo de ayudantes.

«Si el Gobierno luchase contra la corrupción, Sánchez debería aplicar los mismos estándares éticos con los que llegó al poder y destituir hoy mismo a Félix Bolaños o convocar elecciones», subrayó Álvarez de Toledo, muy crítica con que la foto del ministro de Justicia ante el magistrado se haya producido el mismo día en que el Consejo de Europa afeaba al Gobierno la «pobre implementación» de las recomendaciones que le hizo en 2019 sobre corrupción e integridad.

La diputada popular utilizó su habitual verbo afilado al asegurar que Bolaños «será recordado» por convertir su departamento en «una calamidad ministerial» y en «la viva imagen de su propio fracaso». Y enumeró las que han sido, en su opinión, las «cuatro grandes hazañas antidemocráticas» del titular de Justicia desde que llegó al cargo hace apenas dos años: la redacción de la ley de amnistía; mantener al fiscal general del Estado pese a la «revelación de secretos» de una adversaria política; convertir la Presidencia del Congreso «en una humillada correa de transmisión del Gobierno» y erigirse en «abogado defensor» de la familia del presidente.

A la imagen de Bolaños declarando ante el juez Peinado también se refirieron ayer en el Ejecutivo, pero en este caso para cuestionar que el instructor le haya citado aunque su testifical «no haya sido solicitada por ninguna de las partes, ni siquiera por las acusaciones». Bajo este argumento, el titular de Interior y juez de carrera, Fernando Grande-Marlaska, señaló que la citación de su compañero le parece «curiosa» porque, desde su «perspectiva» y vasta experiencia, «esta instrucción es el paradigma de lo que no es una instrucción, a diferencia del 99,9% de las de los jueces y juezas de este país, que realmente sí que son verdaderas instrucciones».

Grande-Marlaska se refirió a que hay «muchas piezas abiertas, muchas investigaciones sin una concreción del objeto de la investigación», para afirmar que no se sabe «a ciencia cierta qué es lo que se está investigando». Dijo que «después de un año, no se ha observado ninguna irregularidad porque no la hay» y la instrucción «ya ha sido desautorizada» por la Audiencia de Madrid, por lo que cree que el caso está «abocado directamente al fracaso». En realidad, la Audiencia ha avalado el trabajo del juez después de excluir de sus pesquisas el rescate de Air Europa.

En la misma línea se manifestó el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, quien defendió que «el Gobierno no tiene nada que ocultar» en una instrucción judicial que, según sus palabras, «dura ya meses y meses sin encontrar nada». «Por lo que veo quedan 48 millones de españoles aún por declarar y supongo que habrá que interrogarlos a todos –ironizó– para intentar lograr algún elemento por parte del juez Peinado».